Carles Guillot y Esther Quintana perdieron un ojo en circunstancias muy similares. Ambos sufrieron el impacto de una bala de goma disparada por un policía, mientras ejercían su derecho a la protesta. En su larguísima carrera judicial por identificar a los responsables, los dos encontraron el empuje necesario en sus compañeras, vínculos, familiares y sociedad civil, no solo para exigir justicia y reparación al Estado, sino también la prohibición de este tipo de armas tan imprecisas como letales.

3×01
Brechas Podcast – Balas de goma

Incontrolables
Indiscriminadas
Intrazables
Desde el año 2000, en el Estado español se contabiliza una persona muerta alcanzada por un disparo directo, y hasta once que han perdido la visión de un ojo.
3 Claves del episodio
